Una de las preguntas más importantes que puede hacerse una persona. ¿Y la respuesta? 

En el mundo digital en el que vivimos, ahora podemos aprender mucho sobre las experiencias cercanas a la muerte de innumerables personas. La información de la que se dispone actualmente es amplia y, en algunos casos, bien investigada. 

Recuerdo cuando tenía 13 años. En ese momento ya podía responder a esta pregunta por mí mismo. Por casualidad, vi un reportaje en la televisión austriaca de un periodista que hizo un trabajo sobre este tema. 

En un hospital, no puedo decir cuál exactamente, hubo un informe sobre una chica que tuvo un accidente y tuvo que ser operada de urgencia. La chica no estuvo presente con su mente durante todo el tiempo. Más adelante en la terapia, la niña hizo dibujos de su operación de urgencia a vista de pájaro, es decir, desde arriba, como si estuviera flotando en el techo. El número de personas presentes era correcto, el entorno, todo coincidía. 

Cómo puede esta chica, saber cuántas personas están presentes y describir la situación con tanta precisión mediante el dibujo. 

Me quedó claro que las experiencias extracorporales deben ser posibles y que, por tanto, podemos salir de nuestro cuerpo y que debe haber algo más. 

Más tarde, me involucré más en este fenómeno y cuanto más lo conocía, más seguro estaba de que continuaría. 

Pero no hay que olvidar la crítica en este caso. Se suele decir que esto no es más que un mecanismo de la mente, que tiene una especie de dispositivo en el proceso de morir, para que se liberen sustancias y se pueda entonces morir de forma natural y sin miedo ni dolor. En principio, se trata de un proceso completamente normal que no tiene nada que ver con la vida después de la muerte. Incluso se han estimulado ciertas áreas del cerebro, provocando una experiencia cercana a la muerte.

Bien, en realidad encajaría, pero simplemente se olvida que la información que comunicaron las personas en cuestión sólo era perceptible fuera del cuerpo, es decir, con una perspectiva diferente. 

Hay innumerables descripciones, desde herramientas que se usaron y volvieron a desaparecer en el cajón hasta personas, conversaciones, etc. 

Considerado sobriamente, sólo se puede llegar a la conclusión de que hay algo más, algo así como la vida después de la muerte.

Si se escucha a los expertos que han trabajado mucho en este tema o a los médicos que han recibido esa información directamente de los pacientes, uno se da cuenta rápidamente de lo convencidos que están todas estas personas. 

En Estados Unidos, un médico ha querido ser muy inteligente y abordar esta cuestión de una vez por todas con un estudio.

Los cuadros se instalaban justo debajo del techo, que sólo podía verse desde arriba. Si alguien ha tenido una experiencia de este tipo, debería poder decir qué tipo de cuadros se instalaron allí. 

El estudio no se completó durante mucho tiempo, se esperaba poder decir rápidamente que no había resultados. Después de mucho tiempo, se dijo simplemente que era necesario investigar más, que las ideas generalmente aceptadas sobre cuándo una persona estaba muerta debían ser mejor investigadas.   

Cómo continúa esto y cómo se ve después es entonces sólo una especulación, pero también muy interesante y también importante.